Echo de menos mi cama, mi almohada, mi cuarto, mis vistas por la ventana. Mis montañas, mi mar, mi playa, mis rayos de sol colándose por la persiana.
Echo de menos esos amigos, esos abrazos, esas sonrisas y esos paseos. Andar y andar hasta no poder mas.
Lo echo tantísimo de menos... No os lo podeis imaginar.
Venga, siempre puedes llamar o escribirles algo a tus amigos.
ResponderEliminarIr a esa montaña, playa o mar con tu almohada.
Siempre se puede intentar hacer algo. Cuando ya tengas una edad echarás de menos esos momentos, y será demasiado tarde para ello.
P.D. Me encanta esa zona, he estado allí 3 veces y me fascina todo, sin excepción... Soy del sur.